Una joven, identificada como María José Guiner Varela, realiz9 el pasado 28 de marzo una denuncia falsa, luego de que al interior de un cine en Plaza Perisur le pidieron bajar los pies de los respaldos.
La joven acuso al encargado del cine de tocamientos y abuso sexual, lo cual no ocurrió, y de eso fueron testigos policías bancarios que estuvieron en todo momento atentos.
«Si yo te acuso, te vas 80 años a la cárcel o por lo menos un buen rato hasta que demuestres que eres inocente; tu trabajo lo pierdes hoy y de eso yo me encargo», le dice la joven al trabajador de un cine, a quien pretendió señalar por presunto acoso en los videos que se viralizaron en redes.
En el interior de una sala de cine en Perisur, la joven, estaba acompañada de su mamá, identificada como Ana María Varela Gómez, fue la que agredió al empleado de la cadena exhibidora Cinépolis, quien le había pedido que bajara los pies de los asientos delanteros.
Las mujeres fueron grabadas por el propio empleado y exhibidas por una usuaria de TikTok con la etiqueta #LadyCinépolis.
De acuerdo con lo que se relata en los videos, la joven pateó al trabajador de la sala de cine, quien por esa razón empezó a grabar la discusión, en la que ellas recurrieron al discurso feminista para señalarlo por presunto “acoso” al grabarlas y fotografiarlas sin su autorización.
La madre logró hablar con el gerente, quien intentó ofrecer una disculpa, Sin embargo, de cualquier forma las dos siguieron discutiendo y la joven incluso amenazó al empleado con meterlo a la cárcel y provocar su despido.
Oficiales de la Policía Bancaria e Industrial (PBI) de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México, desalojaron a dos mujeres después de que fueron señaladas de alterar el orden en un cine ubicado al interior de una plaza comercial en la alcaldía Coyoacán.
Los hechos ocurrieron el pasado 28 de marzo del presente año cuando un empleado solicitó a las asistentes que bajaran los pies de los asientos porque podían dañar las instalaciones, momento en que comenzó una discusión al interior de la sala.
Inmediatamente, el gerente solicitó el apoyo de los oficiales de la PBI que se encontraban en labores de seguridad y vigilancia, quienes, conforme a los protocolos de actuación, tranquilizaron a los involucrados.
Por su parte, una vez que llegaron a un acuerdo, el gerente solicitó que las mujeres fueran retiradas del lugar y dijo que no presentarían, no realizarían ningún acto legal en su contra.
Cabe mencionar que, personal de la PBI se mantuvo a la expectativa sin participar en la discusión, pero se mantuvieron pendientes para cualquier apoyo requerido.