De Interés Global

Tragedia en Marruecos

Por Jessica Woolrich

El viernes 8, Marruecos estaba en calma sin imaginar lo que estaba por suceder, ya que durante la noche la tierra comenzó a sacudirse con una fuerza que no se había visto en aquella región en más de 100 años, ya que usualmente los sismos no son algo comunes en aquella zona del mundo, ya que la mayoría de los sismos que suelen sentirse en la zona, ocurren en Italia, en Grecia y Turquía, por lo que al ser algo poco frecuente en Marruecos, la nación africana no estaba preparada, por lo que no habían programas de prevención, estrategias de rescate, ni reglamentación para las construcciones y por dicha razón el temblor de 6.8 grados se convirtió en una terrible catástrofe que dejó una enorme oleada de destrucción a su paso.

Los paisajes que hoy se ven, están cubiertos de escombros y de personas que sin saber cómo, se esfuerzan por encontrar sobrevivientes entre las ruinas de un país que se encuentra devastado por los más de 2600 fallecidos y por lo que seguramente se irán sumando a esta cifra.

Las voces que claman por ayuda no se han hecho esperar, pero también las voces que comienzan a criticar al monarca Mohamed VI, ya que mientras el pueblo está sufriendo y busca recursos para enfrentar la catástrofe, el rey se encontraba en Francia, aparentemente por un tratamiento médico, pero lo que muchos critican es que él estaba en una de sus lujosas y muy valiosas propiedades francesas, como un castillo o una mansión cerca de la Torre Eiffel, valorada en más de 80 millones de Euros, lo que para muchos es un insulto ante la terrible situación que se vive no sólo hoy sino todos los días en Marruecos, por lo que hoy por hoy, se vislumbra una recuperación mucho muy complicada para dicha nación y es probable que el problema se complique porque incluso los hospitales no cuentan con lo necesario para hacer frente al desastre que hoy les ha acontecido.

Así que seguramente se escucharán más voces exigiendo cambios y pidiendo ayuda para poder reconstruir un país que hoy se encuentra en ruinas.

Jessica Woolrich